¡Acción, se rueda! Estos son los Renault más icónicos en la historia del cine

Los coches más icónicos de Renault han aparecido en más de 3.000 películas y series, algunas de ellas muy míticas, como las de ‘James Bond’, la saga de ‘El Padrino’ o el éxito de Netflix ‘Lupin’. En este apasionante viaje, veremos cómo el Renault 4, el Renault 11 o el mismísimo Twizy han puesto su granito de arena en la historia del cine y la televisión.

Corte a primerísimo primer plano de una rueda humeante. Huele a goma quemada y tiene a los villanos detrás pisándole los talones. Los parachoques, más bien. La cámara ahora pincha al rostro sudoroso del prota, que entorna una mueca inconfundible. El aire se carga de electricidad. Freno de mano, volantazo y a volar. Esto podría formar parte de cualquier película. Y el coche muchas de esas veces será un Renault. 


Los más devotos de las filmotecas saben que los iconos de Renault han aparecido en más de 3.000 películas, según la Internet Movie Cars Database. Así que aprovechemos, hagamos un viaje por el audiovisual y por el tiempo, de los paseos nocturnos con los antinieblas apagadas a las carreras por las principales ciudades europeas… o el simple silencio mientras dos amantes se abrazan sobre una carrocería.

Amor más allá de la carrocería: Renault 4

Y arrancamos, como no podía ser de otra manera, con el Renault 4, el coche francés más fabricado en la historia que ha cumplido 60 años. Con casi 4.000 apariciones en producciones registradas, este pequeño utilitario vivió todo tipo de eventos y conflictos internacionales entre 1961 y 1993. Un clásico de tracción delantera, suspensión de barras y refrigeración por circuito cerrado.


Cuatro porque tenía cuatro puertas, cuatro plazas y cuatro caballos de potencia. Cuatro como una buena defensa en un partido de Champions. El coche de los obreros y los comerciantes que se pasaban el día en la carretera. Un símbolo de libertad que constituyó una de las bases de los utilitarios que veríamos en las calles de nuestras ciudades.


Pero también un símbolo cinematográfico: lo veíamos en ‘Tras el corazón verde’ (1984), la icónica aventura de Robert Zemeckis donde la novelista romántica Joan (Kathleen Turner) salva su vida gracias al aventurero Jack Colton (Michael Douglas). Jack escapa de milagro de los peligros de la selva colombiana, huyendo con un Renault 4 amarillo con matrícula falsa, como no podría ser de otra forma.


A lo largo de los años hemos visto cientos de Renault 4. En la divertidísima ‘Campeones’, en la icónica ‘Doctor Who’, en series como ‘Narcos o ‘Cuéntame’ —donde han vivido cien mil aventuras—, pero también en producciones apabullantes como ‘Los Vengadores: Endgame’, en un pequeñísimo fragmento antes de la hecatombe final. 

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Y qué decir del Renault 4L —concretamente del ‘Poste’, porque se fabricó para el servicio postal francés— que sobrevive a, literalmente, los viajes en el tiempo en la película francesa ‘Los Visitantes’ (1993). Esa ele de Lujo, aunque las malas lenguas lo usarán para "lata", lo transformó en un auténtico icono pop. Y es que era un coche incomparablemente versátil, tan polivalente que igual te arreglaba la mudanza —gracias a su banqueta extraíble— que te permitía competir en el rally París-Dakar.

La velocidad como bello arte: Renault 5

Y después del 4 ya sabes cuál viene. Toda una generación recuerda aquel diablo rojo en la persecución de ‘Nunca digas nunca jamás’ (1983), con un Sean Connery con licencia para matar… y para conducir como un salvaje.


Pero el espía británico no fue el único que pudo pasearse con esta joya: el Renault 5 ha aparecido en miles de producciones. Sin ir más lejos, en ‘Patria’ (2020), la serie basada en el libro Patria de Fernando Aramburu, o en la comedia de viajes en el tiempo ‘Flashback’ (2021), de Caroline Vigneaux. 2.7000 veces hemos visto un Renault 5. Como decía el documental ‘Too Fast To Race, es imposible sacarlo de la carretera.

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De hecho, el agente 007 le cogió el gusto al rombo porque en James Bond: Panorama para matar (1985), Bond sobrevive a una persecución por pleno centro de París con solo medio Renault 11, con toda la segunda mitad del vehículo completamente destrozada. Es lo bueno de estar ante una tracción delantera, poco querido en la época pero esencial para entender la conducción de años posteriores.

Un refugio romántico en un coche histórico de Renault

¿Puede ser un coche un refugio romántico? Que se lo digan a todas esas parejas a lo largo de la historia que no tenían suficiente dinero para pagarse una noche de hotel y acamparon humildemente en los asientos traseros del coche de algún amigo, hermano mayor u otro familiar cercano. Subámonos al Titanic, a ese momento en el que Rose y Jack, unos jovencísimos Kate Winslet y Leonardo DiCaprio, confirman lo evidente ante el titilar de las velas, en la hora bruja, momento de las confesiones de los amantes. 


Escondidos en un Renault AX Limousine, un Type CB con 35 CV de potencia —podía alcanzar los 56 km/h, ahí es nada—, la rebelde Rose y el polizón Jack consagraron una de las escenas más íntimas y bellas del cine moderno. Por cierto, James Cameron se sacó de la manga un relato apócrifo, pues hay dudas sobre si realmente había un coche a bordo del Titanic, ya que no hay registros oficiales de la carga que transportaba el buque.


Como fuera, el dueño del vehículo, William E. Carter, fue un pasajero que sobrevivió al hundimiento del barco. Lástima que aquella “limusina”, que en 1911 costó la nada desdeñable cifra de 437 dólares, acabara en el fondo del mar… 

Tócala otra vez, Dauphine

dauphine renault

Si hay un coche de Renault que siempre ha congeniado con el celuloide ese es el Dauphine, la evolución del Renault 4CV de forma delfinada. Su nombre en realidad significa “heredera al trono”, por aquello de hacer referencia al Delfín de Francia, Luis XIII, ya que aspiraba a ser el Renault más vendido de la historia.

 

Siguió la senda de los anteriores y se comercializó en LATAM o Estados Unidos —y fue un exitazo en España, logrando ser el coche importado más vendido del país, por delante del Escarabajo de Volkswagen— y recibió no pocas iteraciones, donde destaca el Gordini de 1958, con caja de cambios de cuatro velocidades.


Lleno de prestaciones, el Dauphine también se dejó ver en manos de James Bond, en ‘Los intocables’, ‘El Padrino’ o ‘El coche fantástico’.  Fue un coche esencial de la mítica serie ‘The Man from U.N.C.L.E.’ —la de 1964, no las pelis que llegarían después—, y su iconografía es tan relevante que hasta en ‘Cars 2’ hace acto de presencia. Un verdadero tótem asociado a espías y suspense.

El coche de los sueños de niños y adultos

Aunque os vamos a confesar una cosa: nuestro favorito es otro, un coche capaz de convocar a Morfeo: era sentarse en la trasera y caer rendido. Algunos ya sabrán de cuál hablamos, ¿verdad? Exacto, del Renault 21, el turismo producido entre 1986 y 1994, sucesor del Renault 18 y el predecesor del Renault Laguna… y uno de los coches más cómodos de la historia por su cuidada tapicería.

 

Con más de 500 apariciones en series y películas, el Renault 21 fue el coche de las familias. Un Renault 21 Nevada se dejaba ver en decenas de episodios de ‘Médico de familia’ o ‘Manos a la obra’ y, más recientemente, en ‘Los Briceño’ (2019), una de las producciones colombiana más populares de Netflix. Otros Renault 21 se dejaban ver en pelis como ‘Incautos’ o ‘Tesis’. Historia de nuestra televisión, pero también fuera de nuestras fronteras: en ‘Tom Clancy's Jack Ryan’ o ‘Nikita’ también aparecían modelos en blanco roto, gris acero y azul.

El retorno de las musas

Y todavía estamos dejando para el final dos de esos coches que se huelen y se respiran como algo único. El primero debe su nombre a una de las nueve musas de la mitología griega: Clio es la inspiradora de lo heroico, destinada a trascender. El coche de los spots más adictivos, el favorito de la MTV y del Inspector Gadget que marcaría el devenir de la propia marca dentro de Europa.


Puesto a la venta en 1990, con casi 20 millones de unidades colocadas a lo largo de su historia, el mítico Renault Clio ha aparecido más de 5.000 veces en alguna peli o serial. En las series ‘Aída’, ‘Compañeros’, ‘Los Serrano’, en la italiana ‘Suburra’ o la británica ‘Where the Heart Is’.


Ganando el galardón de Coche del Año en 1991 y 2006, un Clio blanco marcaba el devenir de cierta persona en ‘El Padrino III’ de 1990, el cierre de la trilogía de Francis Ford Coppola. James Bond también manejó un Clio rojo en ‘GoldenEye’, la cinta de 1995 protagonizada por Pierce Brosnan. Hasta los inolvidables agentes Mulder y Scully de ‘Expediente X’ viajaban en un Renault Clio azul en algunos episodios de la quinta temporada.

En el futuro los coches serán… ¿más pequeños?

Olvídate de los coches voladores, pongamos los pies en la tierra. Porque nuestra última parada en este viaje —o puede que no— es en un momento indeterminado pero magníficamente filmado. ‘El Teorema Zero’ (2013), la infravalorada película de Terry Gilliam, planteaba coches eléctricos autónomos de dos plazas, diminutos y funcionales. Y entre ellos destacaba un Renault Twizy como referente futurista.

El mismo Twizy biplaza que se deja ver ‘Ready Player One’ (2018), la película de Steven Spielberg ambientada en 2045. No sabemos quién aguantará el tipo hasta entonces, pero está claro que Renault sí. Al fin y al cabo, en ‘Al filo del mañana’ (2014) la supervivencia se garantizaba en una furgoneta Renault, igual que en 1968 en ‘Inspector Clouseau, el rey del peligro’, la tercera entrega de ‘La Pantera Rosa’ donde una furgoneta Renault 1000 soportaba todo tipo de tropelías.

 

Porque el futuro siempre mira al pasado y gracias a ello Renault ha sabido innovar y adaptarse a los cambios del mercado y la sociedad, con una participación en competiciones como la Fórmula 1, que ha servido para transferir tecnologías y experiencias a sus vehículos de serie. Sobrevivir es trascender, trascender es sobrevivir.


Y esto conecta con la perspectiva ecológica, con el foco en recurrir a materiales orgánicos como textil con un 72% de fibras recicladas de la tapicería de algunos modelos, el uso de madera de bosques europeos o cuero vegano. Mientras otras marcas optan por SUV de tamaño gigantesco, la marca del rombo respeta y conserva una mentalidad que ha sobrevivido a la realidad y la ficción. Bueno, y a las torturas: En ‘Indiana Jones y la última cruzada’ (1989), un Renault Torpedo azul atravesaba los desiertos en busca del Santo Grial. No te podemos chivar si lo encontraron o no, pero sí que el Torpedo aguantó como un jabato.

Última parada (ahora sí): los fenómenos en ‘streaming’

Ha quedado más que demostrado en estas líneas que Renault siempre ha estado presente en la retina de los más cinéfilos, ya fuera en historias pasadas o en el futuro más sorprendente. Pero el fabricante francés de automóviles no podía renunciar a la cita del período más dulce de la ficción en ‘streaming’, conocido por algunos como la Tercera edad dorada de la televisión. Sin rodeos: a Renault también le gustan las series.


¿Te suena la historia de un hombre de ingenio infalible enamorado a su vez de las peripecias que escribió Maurice Leblanc para su caballero ladrón? Puede que así no. ¿Pero y si te decimos que ese hombre se llama Assane Diop? Ahora sí, ¿verdad? Nos referimos a ‘Lupin’, la adictiva serie de Netflix protagonizada por Omar Sy que sigue los pasos de un maestro del disfraz que emula a Arsène Lupin, su ídolo, y cuya tercera temporada se estrenó en octubre. En ‘Lupin’ hay que estar atento —atentísimo— a lo que hace Diop. Nada es lo que parece. Y ojo, porque si prestas atención, podrás ver modelos como el Renault Captur, el SUV todoterreno de la firma gala.

¿Un ejemplo más? Si lo tuyo son los crímenes, seguro que has visto ‘Cadáveres’, otra propuesta de Netflix —también estrenada en octubre—, esta vez basada en una novela gráfica de Vertigo, en la que cuatro investigadores londinenses hacen lo posible por resolver un asesinato que cambió el curso de la historia. Lo mejor de todo es que pertenecen a cuatro épocas diferentes, de 1890 a 2053. Y eso le da a Renault la oportunidad de acompañar a los sabuesos por partida doble: con el Renault Megane E-Tech 100% eléctrico en el presente y con el ‘concept car’ nuevo Scenic E-Tech 100% eléctrico en el futuro, a la venta durante la primera mitad de 2024 y con una autonomía de más de 600 kilómetros. La innovación siempre como lema, en la realidad y también en la ficción.

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